Áreas de Oportunidad (14.4)

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.

Analicemos un poco en el comienzo como Dios Nuestro Señor nos creó:

Génesis 2:

7 Y Dios el Señor formó al Hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz hálito de Vida, y el Hombre se convirtió en un ser viviente.

18 Luego Dios el Señor dijo: «No es bueno que el Hombre esté solo. Voy a hacerle una ayuda adecuada».

21 Entonces Dios el Señor hizo que el Hombre cayera en un sueño profundo y, mientras este dormía, le sacó una costilla y le cerró la herida.

22 De la costilla que le había quitado al Hombre, Dios el Señor hizo una Mujer y se la presentó al Hombre,

23 el cual exclamó: «Esta sí es hueso de mis huesos y carne de mi carne. Se llamará “Mujer” porque del Hombre fue sacada».

24 Por eso el Hombre deja a su Padre y a su Madre, y se une a su Mujer, y los dos se funden en un solo Ser.

Leemos los pasajes bíblicos anteriores y los volvemos a leer y pareciera que fue un proceso muy sencillo, pero es claro que solo Dios Nuestro Señor puede hacerlo con esa sencillez y perfección y que todo quede tal y como lo planeó y lo diseñó.

-Lo primero que podemos notar es que los creó de manera diferente: al Hombre lo creó del polvo de la tierra y tuvo que soplar sobre Él para darle la Vida.

–A la Mujer la creó de una costilla sacada del Hombre, que en cierta manera es algo que ya contiene Vida, por lo tanto, ya no tuvo que soplar sobre Ella.

–«Entonces los procesos diferentes de Diseño y Creación dieron por resultado 2 seres aparentemente diferentes, pero con una conexión esencial».

–Dios Nuestro Señor sabe muy bien lo que dice: “No es bueno que el Hombre esté solo”. Acto seguido decide que el Hombre necesita una ayuda adecuada. Y al mencionar su soledad efímera, podemos deducir que le quiere dar al Hombre una Compañía. A todas luces se nota que está planeando darle al Hombre algo que lo “complemente”, algo que añadir a su Vida para hacerla mejor, más completa, efectiva y perfecta.

–Por último, para dar por terminada su Creación, los vuelve a unir al bendecirlos y decirles: “Y los dos se funden en un solo Ser”. Dando por entendido que el “Ser” comprende las partes física, emocional, intelectual, espiritual y sobrenatural.

Hombre y Mujer Comprometidos: el diseño de Dios Nuestro Señor contempla que, aunque tengan diferencias, siempre puede haber algo muy fuerte que los funda para formar un solo “Ser”, llámese complemento, compañía o ayuda adecuada.

Es un hecho real que somos diferentes, pero siendo más las compatibilidades, ¡Vale la pena luchar y seguir!

¡Que Dios todopoderoso te bendiga a Ti y a tu pareja!

Señor Mio Jesucristo, te quiero confesar que Yo como Hombre que soy, amo profundamente a mi Mujer. A la vez queremos pedirte que nos ayudes a darnos cuenta en todo momento que, aunque pensamos, sentimos y somos diferentes, nuestro Amor más la Comprensión y Aceptación, deberán ser suficientes para vencer cualquier diferencia.

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