
En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Yo Novio, te acepto a ti Novia, como mi Esposa…………
Yo Novia, te acepto a ti Novio, como mi Esposo…………
¿Se dan cuenta que estas 10 palabras se dicen en 5 segundos? y justo:
–En esos 5 segundos los Novios libremente están consintiendo tomar a la persona que tienen enfrente como su Esposo(a).
–En esos 5 segundos pasaron de llamarse Novios Comprometidos a llamarse Esposos Comprometidos.
–En esos 5 segundos los Novios mismos, se confirieron el Sacramento del Matrimonio.
–En otras palabras se dijeron: “Tú toda mía y Yo todo Tuyo”, “Tú todo mío y Yo toda Tuya”.
Lo único deseable aquí es que aunque se aceptaron mutua y públicamente, quiera Dios que haya sido una Aceptación meditada y decidida con bases firmes y después de una excelente y nutritiva Preparación Matrimonial
CIC # 1623: “Según la tradición latina, los Esposos, como ministros de la gracia de Cristo, manifestando su consentimiento ante la Iglesia, se confieren mutuamente el Sacramento del Matrimonio. En las tradiciones de las Iglesias orientales, los sacerdotes –Obispos o presbíteros—son testigos del recíproco consentimiento expresado por los Esposos, pero también su bendición es necesaria para la validez del Sacramento”.

En el momento que el Sacerdote les da la bendición y les dice “Yo los declaro Marido y Mujer” se sella el Compromiso adquirido, con Jesucristo como testigo.
–El Compromiso de la libre y mutua Aceptación.
–El Compromiso de la libre y mutua Promesa de Fidelidad.
–El Compromiso de la libre y mutua Promesa de Amor y Respeto.
–El Compromiso de la libre y mutua Promesa de Trascendencia para toda la Vida.
Luego el Sacerdote también les dice: “Lo que Dios ha unido, no lo separe el Hombre”.
San Mateo 19, 6: “Así que ya no son Dos, sino Uno solo. De modo que el Hombre no debe separar lo que Dios ha unido”. Esta es palabra de Dios.
Ahora viene lo extraordinariamente desafiante: “Ganarse auténtica y verdaderamente el Título de Esposo y Esposa, lo cual es la parte más importante del compromiso del Amor Conyugal”.
Aunque si actúan como se les ha recomendado, “Como un verdadero Hombre y como una verdadera Mujer, seguro lo lograrán”
¡Que Dios todopoderoso te bendiga a Ti y tu pareja!
Señor Jesucristo, gracias por todo lo que me has dado, y muy especialmente gracias por esta persona con la cual uniré mi Vida, mi proyecto y mi destino. Ayúdanos para procrear una Familia numerosa y un Matrimonio Tradicional duradero y feliz.